España «suspende» en acogida de refugiados: ha reubicado a 480 de los 17.387 comprometidos

  • En vísperas de la cumbre de líderes mundiales sobre refugiados, Oxfam analiza la política española en migración, cooperación y asilo y le otorga un suspenso.
  • La ONG denuncia que se ha realojado a menos del 3% de la población refugiada comprometida con la Unión Europea, 480 personas.
  • Para cumplir su compromiso España debería acoger a 16.907 refugiados más.


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Refugiados sirios a su llegada a Madrid en el mes de julio. (ARCHIVO)

Un matrimonio y sus cuatro hijos, que cruzaron de Siria a Líbano huyendo de la guerra, aterrizaron el pasado martes en el aeropuerto de Barajas. La familia de refugiados, instalada ya en Córdoba, eleva a 480 el número de personas acogidas por España en los últimos dos años en el marco de la campaña para aplacar la actual crisis mundial y sin precedentes de los desplazados. Sin embargo, la lista de acogidos es tan exigüa que no llega al 3% del total de personas que España se ha comprometido a acoger: 17.387.

Otras imágenes Refugiados 3 Fotos A pocos días de que se celebre en Nueva York una cumbre al más alto nivel de líderes mundiales para tratar sobre la atención a la población refugiada, la ONG Oxfam ha hecho público un informe en el que analiza las políticas españolas de asilo, migración y cooperación humanitaria y pone un suspenso a España en su respuesta al drama de los desplazados.

«España tiene que ser parte de la respuesta global a este desafío, pero está muy lejos de cumplir con sus compromisos«, concluye Oxfam en un informe en el que pide que el país «dé un giro radical» a la política migratoria, promueva el tránsito seguro y legal de los migrantes y aumente su aportación a los fondos de cooperación.

Oxfam recuerda que España, en 2016, continúa siendo una «potencia media en el mundo», el quinto Estado más importante de la UE en términos económicos, la economía mundial número 14 por PIB y la 26 en el índice de desarrollo humano. Pese a la recesión, los expertos de Oxfam consideran que España «está dotada con recursos humanos, financieros y técnicos más que suficientes para dar una respuesta efectiva a esta crisis global».

Compromiso con los refugiados

Solo medio centenar de graves conflictos han provocado en los últimos años la huída de sus países de 65 millones de personas en todo el mundo. ACNUR, la agencia de la ONU para los refugiados, cifra en casi un millón de personas las que tienen una situación de extrema vulnerabilidad. Se trata de menores no acompañados, ancianos, discapacitados o enfermos. Oxfam considera que España, por su nivel de riqueza y desarrollo, debería ofrecerse a reubicar en su territorio a 15.675, aunque su compromiso actual es de 1.499 para dos años (menos de la décima parte) de los que tan solo ha recibido a día de hoy a 279, los últimos seis la familia siria aficada desde esta semana en Córdoba.

En el marco europeo, España también adquirió el compromiso de colaborar con aquellos países que, como Italia y Grecia, soportan más presión de entradas de refugiados. Oxfam recuerda que el Gobierno español aceptó reubicar a 15.888 personas llegadas ya a Europa, pero a día de hoy solo ha reubicado a 201 (el 1% del total comprometido).

En suma, España debía acoger en su territorio al menos 17.387 refugiados antes de septiembre de 2017. Van 480, con lo que queda un año para acoger a los 16.907 refugiados. Oxfam pide que se aceleren las acogidas y se comience a utilizar herramientas como la expedición de «visados humanitarios» y «visados estudiantiles».

Ayuda humanitaria

La ONG Oxfam dedica un capítulo del informe a la ayuda humanitaria, para resaltar la «radical caída» de la aportación española a los fondos de emergencia de la ONU, con un recorte del 96% de fondos, tomando como referencia el año de mayor contribución, 2008, el de la mínima (2015). Mientras tanto, las agencias de la ONU han pasado de dar asistencia a 32 millones de personas a 95 millones en una década, recuerda Oxfam. Esto le ha hecho pasar de estar entre los cinco principales contribuyentes de este fondo al puesto decimoséptimo, con una contribución de dos millones de dólares.

Oxfam denuncia que la acción humanitaria ha sido la partida más recortada de todo el Presupuesto General del Estado, sufriendo una bajada del 67% desde 2011. Además, considera insuficientes los 16 millones en ayudas y acción humanitaria enviados el año pasado a Siria, muy lejos de los 7,2 mil millones de dólares requeridos. Mientra, la ONG critica que ni Afganistán ni Somalia recibieran ayuda alguna durante ese ejercicio.

Blindaje de las fronteras

Para Oxfam también es criticable el «modelo de gestión de los flujos migratorios» mantenido por los sucesivos gobiernos españoles, porque «parece haber obviado el coste que tiene sobre los derechos de los migrantes y refugiados que llegan a nuestra frontera». A su juicio, el modelo de «frenar» la llegada de personas no ha tenido en cuenta los derechos humanos, tal y como ha sido denunciado en reiteradas ocasiones por el defensor del pueblo, el tribunal europeo de derechos humanos y Naciones Unidas. En su punto de mira: las leyes de extranjería, las devoluciones en caliente o las vallas y concertinas.

Trabas al asilo

En España solicitar asilo es un derecho que se ve dificultado por el procedimiento burocrático, denuncia asimismo Oxfam, que criteica a que a los solicitantes no se les da información completa sobre plazos y criterios de su instancia, «por los que muchos se ven expulsados sin que hayan tenido tiempo para ejercer su derecho a solicitar asilo».

«Ser solicitante de asilo en Espña no es garantía de protección» dicen los autores del informe. Si de promedio en la UE conceden protección internacional a un 52% de los solicitantes, en España este porcentaje no sube del 31%.

Pese al panorama dibujado, Oxfam considera que la cumbre de Nueva York supone «una oportunidad única para alcanzar un consenso político y poner en marcha un plan de acción que se centre en salvar vidas, brindar protección y asistencia, y respetar la dignidad de las personas». A su juicio, «España debe utilizar esta cumbre para dar un giro radical a su política de migración e iniciar una nueva senda en la agenda de desplazamientos donde los derechos prevalezcan por encima de cualquier otra política». Para ello, resaltan, «España está en una posición privilegiada para hacer este cambio: tiene el apoyo de gran parte de la sociedad, no existen políticos xenófobos o racistas y dispone de los recurso humanos, financieros y técnicos para dar una respuesta efectiva a la crisis global».