Los vecinos de Laroles inauguran el teatro que han construido entre todos

Maria Cappa | 14-08-2014 | http://www.lamarea.com/2014/08/14/un-teatro-entre-todos-para-la-revitalizacion-cultural-y-economica-de-laroles-granada/

Hace varios años que es habitual escuchar que España está renunciando a la Cultura, que desde los diferentes gobiernos se la ha reducido a una actividad de ocio poco rentable y que los agentes culturales, especialmente los relacionados con el cine y el teatro, están siendo sistemáticamente castigados por una cuestión ideológica. En medio de esta batalla de denostación por parte de unos y resistencia por parte de otros, aparece Un Teatro Entre Todos.

Los vecinos de Laroles inauguran el teatro que han construido entre todos
Imagen de las obras de construcción del teatro.

Es un proyecto que desde hace dos años se está desarrollando Laroles, un pueblo de la Alpujarra granadina. Consiste en construir un teatro en una antigua era de la zona que sirva como reclamo para atraer a un tipo de turista cada vez más interesado en los productos ecológicos, el turismo sostenible y en aprender sobre las actividades socio-culturales del lugar al que viajan. Es decir, un proyecto a contracorriente, pensado para revitalizar económicamente un pueblo a partir de su teatro. “Esta zona puede ofrecer una experiencia global. El teatro actúa como reclamo, pero después lo visitantes pueden realizar actividades satélite: organizar una visita a unas bodegas, catas de vino o, si alguien produce queso, puede hacer talleres.”, explica una de sus impulsoras, Anna Kemp.

Han sido dos años de un trabajo duro y arduo para concluir con la primera fase que, básicamente, ha consistido en conseguir financiación y construir físicamente este espacio. Esta etapa, por fin, ha concluido, por lo que este fin de semana los vecinos de Laroles lo celebrarán con la inauguración del teatro por el que tanto se han esforzado. Según Kemp, “era muy necesario que lo inauguráramos porque llevábamos mucho tiempo viviendo del aire, trabajando sin ver nada concreto. Y era una recompensa para una comunidad que nos ha seguido ciegamente sin poder disfrutar de esa magia. Nos toca saborear lo que hemos logrado hasta el momento”.

Para ello, contarán con el célebre escritor británico Chris Stewart, autor de Entre limones, quien se ofreció a escribir un texto pensado expresamente para este evento, basado en sus vivencias como hijo adoptivo de la Alpujarra. También estará la compañía Germania de Teatro, que será la encargada de hacerle un guiño a Federico García Lorca, autor que será el eje central de lo que será este teatro más adelante. Además, el periodista Miguel Rabaneda acudirá con Teatro en Bolas, su compañía de teatro improvisado (que este año ha quedado finalista en el concurso de talentos de los Teatros del Canal de Madrid), quien interpretará una obra a partir de las sugerencias del público. También actuará The John Scofield Tribute Band, un grupo de jazz-funk  que Kemp define como “poco conocido pero muy talentoso”.

El proyecto

Tal y como explica Anna Kemp, el lugar en el que está emplazado este teatro había sido una antigua era de trillar inutilizada. “Se nos ocurrió la idea de reencaminarlo hacia un teatro al aire libre, de darle un uso moderno que deja intacto el terreno, no lo estropea, pero de forma más provechosa que si fuera simplemente un mirador”. Un lugar muy especial para esta británica afincada en Laroles por la tradición oral que lleva consigo. “Aquí, mientras trabajaban en el campo, cantaban cantos de trilla, de siega, de vendimia, de muleros… Lo que le añade un plus de contenido a este teatro. Es decir, no está construido en cualquier sitio, sino que es un lugar representa un pasado y es muy querido por la gente del pueblo”.

Que los vecinos se involucraran en este proyecto, aunque pareciera una locura, no fue para nada difícil. “Ocurrió algo similar a lo que sucedió al terminar la II Guerra Mundial”, recuerda Kemp. “En los tiempos difíciles, como uno no se puede acomodar, tiene que arriesgarse más. Y ahora, las circunstancias negativas de la crisis que se vive en toda España y también aquí, curiosamente, nos ha ayudado a que la gente estuviera más predispuesta a involucrarse en la construcción del teatro”. Una idea que, según explica, para que pudiera salir bien fue imprescindible que contara con el apoyo del Ayuntamiento de Nevada.

“De hecho –afirma- sin el respaldo del alcalde habría sido muy complicado que estuviéramos hablando de este proyecto ahora. El dinero que conseguimos del Ayuntamiento, la Diputación de Granada y de la Junta de Andalucía, lo usamos para financiar la primera fase de construcción de los asientos”. Después, apelaron a la financiación colectiva, medio por el que consiguieron reunir el dinero suficiente como para construir dos filas más de asientos y alcanzar un aforo de alrededor de 200 personas. Un proyecto que, además de para reactivar la ilusión colectiva, también sirvió para generar una fuente de ingresos a varias de las familias del lugar.

“Seleccionamos a un grupo de personas, cada una de una familia con todos sus miembros en el paro, para repartir el dinero con el que contáramos de la manera más democrática posible”, relata Kemp. “Además, sucedió algo muy bonito, que fue ver a expertos en el tratamiento de la piedra enseñando a personas que no tenían ni idea de este tema, lo que ayudó a generar un espíritu de colaboración, de colectividad”.

Es verdad que la viabilidad futura de este plan pude ser complicada pero, tal y como recalca Kemp, para todo hay un antes y un después. “La torre Eiffel no existía hasta que se construyó. Todas las tradiciones, los festivales, los museos de referencia, han tenido que nacer en algún momento. Es a lo que me agarro. Ahora mismo estamos en el antes y seguramente habrá un después. No pienso en que no nos vaya a salir porque el miedo al fracaso paraliza mucho. No sé cómo va a salir pero veo muchas posibilidades de que sea para bien”, cuenta ilusionada.

La importancia de la Cultura

Kemp afirma que, a pesar de que no sea lo más habitual en España, es necesario que las instituciones públicas apoyen proyectos como este debido a que es la Cultura lo que nos define como seres humanos. “Siempre pienso en que los hombres de las cavernas tenían una esperanza de vida de 30 años, por lo que sus objetivos eran huir de los bisontes, cazar, cultivar, no morir en el parto y poco más, y aun así tuvieron tiempo para pintar en las paredes” argumenta. “Esto me ha hecho pensar que el Arte tiene que ser uno de los cuatro pilares de la vida; es decir, parir, comer, morir y el Arte. Si no fuera así no habrían malgastado energía en eso. Es una necesidad, no es algo accesorio”. Sin embargo, “hoy en día se margina porque según algunos no es una actividad rentable. Y es un error; es muy importante que los niños sean creativos, que la gente tenga acceso a la Cultura”.

Importante no sólo para crecer como personas, para desarrollar la inteligencia, la sensibilidad o la capacidad de empatía, sino como herramienta fundamental de formación. Anna Kemp tiene, desde hace seis años, una asociación, El Dragón Mágico, con la que imparte talleres de teatro a muchos de los niños del pueblo. Con este proyecto, no sólo los educa en esta disciplina, sino que lo está usando para empoderarlos.

Para la muestra de la obra final del taller de este curso la voz que ha cumplido con el papel de narradora ha sido la de Rosa María Mateos pero, “otros años han sido las de Fernando Colomo o Miguel Rellán”, relata Kemp. “Quiero que los niños crezcan con la idea de que el hecho de ser de un pueblo nos significa que tengas que estar limitado, que puedes acceder a lo que quieras si te lo propones”. Además, este año los alumnos del taller han estrenado el teatro de su localidad. Así, los vecinos del pueblo han podido comprobar qué se siente al ver una representación en un espacio al aire libre con un entorno tan privilegiado como el de la Alpujarra. Y, de paso, ha servido como unas prácticas para los estudiantes del taller de iluminación y sonido que colaborarán en la inauguración oficial de este fin de semana.

Pero ni Anna Kemp ni nadie en Laroles tienen pensado parar aquí. “Queremos tener una programación estable en el teatro, pero será ya para 2015”. Y, por supuesto, Federico García Lorca será la figura central. “Creemos que, además de servir de reclamo turístico, representa muy bien la experiencia global que queremos ofrecer. Lorca está muy vinculado con Granada, creía mucho en acercar el teatro a la gente, cosa que puso en práctica con La Barraca y era polifacético: hizo dibujo, escribió canciones, poesía, le gustaba el jazz, por supuesto hizo teatro… Representa muy bien la esencia de este proyecto y nuestros objetivos”. Además, cuentan con la ayuda de la Fundación García Lorca, “que nos va a servir para no meter la pata y elegir obras, montajes, espectáculos de danza con un alto componente de calidad”.

Una de sus metas es posicionarse como un referente dentro de España. Su objetivo es “que, cuando la gente quiera ir a ver una obra de Lorca, Laroles sea un sitio de visita obligado”. Y, junto con el teatro, el pueblo. El municipio tiene ya una logística bastante desarrollada en cuanto al alojamiento y la restauración, “lo que no hay es ocupación”, señala Kemp. Por ahora, el medio de transporte con el que más fácilmente se puede acceder a Laroles es el coche. Hay un tren que llega hasta Guadix, pero después habría que coger un taxi que tarda una hora en llegar hasta el pueblo.

Una carencia que, bien mirada, puede convertirse en otra posibilidad más de ingresos para los vecinos de la zona. Podría crearse una empresa de servicio de transportes para quienes no quieran utilizar el coche para llegar hasta este pueblo. O crear una ruta turística aprovechando la localización de Laroles. “Estamos a mitad de camino entre Granada y Almería. Se podría crear una especie de paquete turístico que saliera desde Granada, pasara por el teatro de Laroles y terminara en Cabo de Gata; o al revés. El tema es ver cómo puede organizarse”, avanza Anna Kemp. Posibilidades hay infinitas y, además,cuentan con una ventaja. “Cada vez es más fácil que la gente se involucre con el proyecto. Los problemas ahora son distintos a los que teníamos cuando empezamos. Son más físicos, o más grandes, pero a la vez tenemos más ayudas”, concluye.