Imputado el policía de la brutal patada a los ciudadanos concentrados en el IES Pau Claris de Barcelona durante el 1-O

Un informe policial permite identificar el agente. La patada se convirtió en uno de los iconos de la brutalidad policial de la histórica jornada.

Patada policial

Imagen del momento en el que el policía salta para dar la brutal patada a los concentrados en el instituto Pau Claris el 1-O. (TV3)

Fue una de las imágenes más icónicas del 1-O en Catalunya. El agente de la Policía Nacional responsable de la patada voladora en el Instituto de Secundaria  Pau Claris de Barcelona el 1 de octubre de 2017 ha sido identificado e imputado, según  informan TV3 y El Periódico de Catalunya.

La identificación ha sido posible gracias al análisis de varias imágenes aportadas por los denunciantes. Ahora el juez le tendrá que citar para declarar como imputado al agente.

«No puede apreciarse la proporcionalidad exigida en el actuar de algunos de los agentes, que efectúan actuaciones que, si bien van dirigidas siempre al desalojo del lugar, en determinados momentos son claramente desproporcionadas o incluso peligrosas»,  ha afirmado el juez sobre la actuación de la Policía Nacional en el instituto Pau Claris aquel día.

El Juzgado de Instrucción 7 de Barcelona, que investiga las cargas del 1-O en la ciudad, mantiene la instrucción tres años después con 63 agentes que ya han sido citados como investigados.

En el procedimiento hay 315 personas que sufrieron lesiones durante las cargas en colegios electorales, y 127 de ellas se han personado en la causa.

Se han personado como acusación la Generalitat, Òmnium Cultural, ANC, el centro de defensa de los derechos humanos Irídia y el Sindicato Profesional de Policía. El juez ha dividido la investigación en una pieza principal y otras 27 piezas separadas.

Este junio, el titular de Juzgado rechazó la petición de la Fiscalía para archivar la causa, argumentando que ve en los agentes «absoluta falta de consideración» a la integridad física y a la dignidad de los votantes.

Sobre la intervención de la Policía Nacional enl juez concluyó que «no puede apreciarse la proporcionalidad exigida en el actuar de algunos de los agentes, que efectúan actuaciones que, si bien van dirigidas siempre al desalojo del lugar, en determinados momentos son claramente desproporcionadas o incluso peligrosas».