La supuesta inseguridad jurídica ha sido el motivo de PP y Vox para votar en contra. El PSOE se abstiene porque la iniciativa registrada por ERC, Junts, Nueva Canarias, Compromís, CUP y Más País “presenta deficiencias”. Irene Montero insta a buscar un consenso antes del 28 de junio.
Irene Montero en el Congreso durante el debate de la proposición de ley trans este martes // Dani Gago
El PSOE ha confirmado que se abstendrá en la votación sobre la toma en consideración de la proposición de tramitación de la ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans que se ha debatido este martes en el Congreso de los Diputados, tal y como había anunciado. Con su abstención y el voto en contra de PP y Vox, el apoyo al texto es insuficiente y la toma en consideración será rechazada.
El texto que se ha llevado a debate este martes es el registrado por ERC, Junts, Nueva Canarias, Compromís, CUP y Más País como proposición de ley a petición de colectivos de personas trans y tras varios intentos fallidos por parte del Ministerio de Igualdad de tramitarla como proyecto de ley a través del Gobierno por el “bloqueo” por parte del PSOE, según denunció el propio Ministerio de Igualdad.
La propuesta que se ha debatido, al igual que el que proponía el Ministerio de Igualdad, se basa en el principio de la libre determinación de género y en la despatologización. Como ha explicado Pilar Vallugera Balañà en su defensa de la iniciativa, de ERC, la versión que se debatía hoy se diferenciaba en que incluía además un apartado específico dedicado a la reparación de las personas trans.
Vallugera se ha dirigido al PSOE para recordarle a este partido que ha votado a favor de textos similares, no solo en diferentes comunidades autónomas, sino también en el informe de una ponencia de la Comisión de Igualdad del Congreso para reformar la ley reguladora de la rectificación registral en 2019, cuya redacción es idéntica a la que recoge el texto que se debatía hoy. “No hablamos de sentimientos, las personas trans no se sienten, son lo que dicen que son”, ha concluido Vallugera. “Hemos llegado a esta situación por su falta de valentía”, ha afeado al PSOE.
Por su parte Pilar Calvo, de Junts per Catalunya, ha pedido apoyo para esta ley cuyo objetivo es “eliminar el último resquicio de discriminación de quienes no se reconocen en el género que les asignaron al nacer”. Calvo Gómez ha resumido en tres los aspectos polémicos de la ley: cómo se va a relacionar con la ley de violencia de género, cómo va a afectar al ámbito deportivo y qué consecuencias puede tener en el régimen penitenciario. A ese respecto, ha recordado que “el fraude de ley no puede ser la excusa para no avanzar en el estado de derecho” y ha insistido en que, si saliera adelante, el articulado se puede ir complementando en el proceso parlamentario.
Íñigo Errejón (Más País): “Es posible que tumben la ley y no van a ganar nada, quizá unos pocos meses más de dolor para las personas trans; es una victoria miserable”
Íñigo Errejón, portavoz de Más País, ha señalado a quienes iban a votar en contra de la ley. “Es posible que tumben la ley y no van a ganar nada, quizá unos pocos meses más de dolor para las personas trans; es una victoria miserable”. Errejón ha contado cómo una compañera esta misma mañana había tenido problemas para entrar al Congreso por no tener un DNI acorde a su identidad: “Imagínese esto todos los días; no estamos legislando para unos miles de personas, sino que estamos legislando qué sociedad queremos”.
Tras Errejón ha sido el turno de Joan Baldoví, de Compromís, que ha recordado cómo las Cortes Valencianas han aprobado recientemente una ley que garantiza la autodeterminación de género con los votos de Compromís, Podemos, Ciudadanos y PSOE.
Por su parte, Vox ha hecho uso de su voto en contra para introducir su argumentario tránsfobo. Para Vox, la ley no habla de personas “transexuales” ni de personas con “disforia de género”, que son los términos patologizantes que utiliza este partido. Al turno han respondido algunos portavoces, afeando al partido ultra su intervención y dando pie a otra intervención de Lourdes Méndez Monasterio para ahondar en su deriva tránsfoba y anti derechos.
Colectivos de personas trans en las escaleras del Congreso este martes 18 de mayo // Dani Gago
En el turno de fijación de posiciones se han posicionado a favor del texto Mireia Vehí Cantenys (CUP), que ha señalado tanto la incapacidad del Ministerio de Igualdad como la actitud del bloqueo del PSOE. “Hoy, la abstención es votar no”, ha advertido a la bancada socialista. Bel Pozueta (Bildu) y Joseba Agirretxea (PNV)se han mostrado a favor, como también ha hecho Isabel Giménez, de Ciudadanos y Sofía Castañón, de Unidas Podemos.
La diputada del PP Margarita Prohens, ha anunciado el voto en contra de su grupo. Para empezar, Prohens considera que “vivimos en una democracia plena” y que “España es un buen país para ser niña, mujer, lesbiana y transexual” ya que “en once países se ajusticia a quien se atreve a ser libre”. Después ha argumentado que el debate viene con “ruido de la izquierda” y que el texto “nada tiene que ver con derechos sino con votos”.
Prohens considera que el texto no tiene consenso político ni social, ni tampoco tiene el Consenso del Consejo de Ministros ni de los colectivos LGTBI. Por último, ha salido por la tangente biologicista: no se conocen las consecuencias de cambiar el concepto de sexo, ha asegurado.
Susana Ros es la diputada del Grupo Socialista que ha fijado la posición de su partido, anunciada por la mañana: la abstención. Y, pese a que ha comenzado desmarcándose de la ultraderecha que “tiene un problema con los Derechos Humanos”, ha dicho, ha recurrido también a argumentos biologicistas como han hecho Vox y el PP.
La diputada socialista Susana Ros se ha aventurado a decir que la ley trans del Gobierno “está cerca de llegar al consejo de ministros y ministras” y la ministra de Igualdad ha pedido llegar a un consenso antes del 28 de junio
Ros no ha llegado a asegurar que la autodeterminación de género pueda poner en riesgo la seguridad de 47 millones de españoles, como hizo Carmen Calvo, pero sí ha insistido en esa idea: el texto es de dudosa constitucionalidad y el cambio registral debe hacerse con garantías. Pero “que nadie se lo tome como un ataque porque no lo es”. Ros se ha aventurado a decir que la ley trans del Gobierno “está cerca de llegar al consejo de ministros y ministras”.
Antes de cerrar el debate, la ministra de Igualdad Irene Montero ha solicitado intervenir en el debate. En su intervención, ha pedido perdón porque el texto debería haber llegado al Congreso de la mano del Gobierno, ha dicho, y porque “las personas trans llevan meses viendo sus vidas cuestionadas”.
Montero ha reiterado su compromiso con que una ley trans que garantice la libre determinación de la identidad de género y ha reconocido dos mejoras en el texto que se debatía hoy y que tienen su conformidad: la garantía de derechos para personas no binarias y el reconocimiento de derechos para personas trans en situación administrativa irregular.
“Es difícil de creer que una ley que tenía seguridad jurídica en 2019 no la tenga en 2021”, ha pedido para finalizar su intervención llamando a recuperar ese consenso, un reto al que ha puesto como plazo la celebración del Orgullo, el 28 de junio.
+info relacionada: El ‘no’ de PP y Vox y la abstención del PSOE tumban el primer intento de tramitar la ‘ley trans’ en el Congreso – eldiario.es, 18-05-2021