El decreto del estado de alarma dio la facultad al Gobierno de centralizar las compras sanitarias para hacer frente al coronavirus, pero ello no significa que las autonomías no puedan abastecerse por sí mismas y así lo admiten fuentes cercanas a Ayuso.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso
La presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso se ha convertido en la principal oposición a Pedro Sánchez durante el estado de alarma decretado tras el auge del coronavirus en España. El líder del PP, Pablo Casado, ha perdido el foco mediático tras haberse paralizado la actividad habitual del Congreso y utiliza a sus presidentes autonómicos para desgastar al Gobierno. Ayuso es la que más protagonismo ha adquirido debido a que Madrid es la comunidad autónoma con más personas contagiadas por coronavirus (14.597) y fallecidos (1.825) del conjunto del estado.
La escasez de mascarillas, tests y equipos de respiración asistida que el personal sanitario lleva denunciando desde hace días genera una fuerte tensión entre comunidades autónomas y Gobierno. Algunos dirigentes territoriales, entre ellos Ayuso, se desentienden de la falta de equipos en sus hospitales y culpan al Gobierno de ello, al mismo tiempo que le acusan de «bloquear» el material.
Por su parte, los jueces contradicen a Ayuso y señalan que debe ser el gobierno regional y no el central quien dote de material de protección a todos los centros de la red del Servicio Madrileño de Salud (SERMAS). El Juzgado de lo Social número 31 de Madrid ha dado un plazo de 24 horas a la Consejería de Sanidad madrileña para proveer a todos los centros de la red del Servicio Madrileño de Salud, ya sean públicos o privados, de batas impermeables, mascarillas FPP2, FPP3, gafas de protección y contenedores de grandes residuos.
«Lo vamos a elevar a la autoridad pertinente, que en este caso es el mando único del Ministerio de Sanidad, y más desde que se decretó el estado de alarma», ha justificado este miércoles Ayuso, reiterando que «hace falta material». En los mismos términos se expresaba su Consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, en una entrevista: «Me parece ciertamente sorprendente que un juez nos pida eso, cuando quien ha asumido todo el control de las compras ha sido el Ministerio de Sanidad. Y ahora nos hacen responsables a las comunidades autónomas. Es un despropósito».
Sin embargo, tras anunciar el pasado domingo que llegarían dos aviones cargados desde China en menos de 48 horas -un cargamento que actualmente desconoce donde se encuentra-, Ayuso ha admitido que es «complicado» adquirir material sanitario fuera de España. Ese anuncio de la presidenta madrileña -que difundió a través de su cuenta de Twitter- pone de manifiesto que las comunidades sí pueden comprar material y que no se trata de una tarea que tenga que desarrollar solo el Gobierno.
El gobierno madrileño admite cierta «imprevisión»
El decreto del estado de alarma dio al Gobierno la facultad de centralizar las compras sanitarias para hacer frente a la epidemia, pero ello no significa que las autonomías no puedan seguir con su labor de autoabastecimiento. Fuentes cercanas a Ayuso admiten a Público que el estado de alarma no ha impedido a las comunidades comprar productos sanitarios por su cuenta y que ha habido cierta «imprevisión» también por su parte. Hasta el pasado sábado han sido las comunidades autónomas las encargadas de la administración de los recursos.
Los Ejecutivos regionales reclaman que las compras que están realizando se queden en sus centros hospitalarios y son varios los dirigentes del PP, Ayuso, Juanma Moreno Bonilla (Andalucía) y Alberto Nuñez Feijóo (Galicia) -junto con el catalán Quim Torra– los que han acusado al Gobierno de requisar o frenar en las aduanas los suministros de equipos de protección individual. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, lo negó el pasado lunes y aseguró que el Ejecutivo solo está luchando «contra personas que quieren especular con estos productos».
Pablo Casado junto a Moreno, Feijóo y Pastor en la toma de posesión del segundo como presidente de la Junta de Andalucía // EFE
Las autonomías están recurriendo a todos los contactos posibles para cerrar las compras con proveedores chinos y piden que ese material se quede en sus territorios, a pesar de que en regiones como Galicia o Andalucía los casos de coronavirus registrados son relativamente bajos en comparación con Madrid o Catalunya y de que el ministro ha pedido un ejercicio de solidaridad del resto de comunidades con Madrid, al ser esta la más afectada.
Sanidad critica que se intente «aprovechar una desgracia» para obtener rendimientos políticos
Este miércoles Salvador Illa ha anunciado que ha formalizado un contrato de compra de material sanitario a China para hacer frente al coronavirus por 432 millones de euros y que esta semana España tendrá una «primera entrega de materiales». Concretamente, mascarillas, guantes y material de protección, tests rápidos y equipos de respiración asistida.
«Hemos comprado y pagado 550 millones de mascarillas, que empezarán a llegar ya y seguirán llegando durante las próximas ocho semanas. Llegarán 11 millones de guantes durante las próximas cinco semanas. En cuanto a tests rápidos, hemos adquirido 5,5 millones para los meses de marzo y abril. Además, recibiremos 950 equipos de respiración asistida durante los meses de abril a junio», ha explicado el titular de Sanidad.
«El Gobierno ha adoptado decisiones siempre fundamentadas en los informes técnicos de los expertos del Centro de Emergencias y Alertas Sanitarias»
Illa ha evitado señalar a sus colegas autonómicos en la comparecencia, pero fuentes del ministerio de Sanidad critican que se intente «aprovechar una desgracia colectiva para obtener rendimientos políticos» y aseguran que el Gobierno ha adoptado decisiones «siempre fundamentadas en los informes técnicos de los expertos del Centro de Emergencias y Alertas Sanitarias» con un «seguimiento permanente» de la alerta en coordinación con las comunidades autónomas.
«Las consejerías de salud han podido y pueden seguir comprando los suministros necesarios para ejercer su misión. El Gobierno no ha dado ninguna orden de incautación. Todo lo contrario, las incontables gestiones llevadas a cabo en un complicado mercado internacional han tenido y tienen el objetivo único de ayudar en las gestiones de compra«, detallan.
Asimismo, ponen el foco en que las consejerías de salud «han tenido años» para estar preparadas ante las hipotéticas emergencias sanitarias que pudieran llegar, después de las críticas al Ejecutivo por falta de previsión. «Y, desde luego, desde el 31 de diciembre, fecha del primer positivo por Covid-19 en China, han tenido margen para hacer acopio de medios para afrontar esta emergencia sanitaria», zanjan.
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