«El término ‘denuncias falsas’ lo utiliza el maltratador y otras personas por ignorancia», dijo en una entrevista la delegada de Participación Ciudadana de la Policía Nacional.
«El término ‘denuncias falsas’ lo utiliza el maltratador y otras personas por ignorancia». Así titulaba El Pueblo de Ceuta la entrevista que realizó a la delegada de Participación Ciudadana de Ceuta de la Policía Nacional Ana Moya, publicada el 1 de diciembre. Moya, que ha dedicado su vida profesional a luchar contra la violencia de género recorriendo centros educativos para concienciar sobre la violencia machista, criticaba que las denuncias falsas de las mujeres contra hombres no son más que un “mito”: “Yo sigo pensando que ese discurso de denuncias falsas lo suele utilizar el propio maltratador porque quiere justificarse y decir que se le ha denunciado falsamente, y otras personas que lo puedan utilizar lo hacen por ignorancia”, explicaba la delegada de Participación Ciudadana ceutí.
Tras la publicación de la entrevista, el portavoz de Vox en la Asamblea de Ceuta, Carlos Verdejo, reaccionó así: “Salimos a vergüenza por día en nuestra Ceuta”, escribió en Twitter el dirigente de la formación de extrema derecha. Un usuario de la mencionada red social también se mostraba descontento con la posibilidad de que “esta señora vaya a colegios adoctrinando a nuestros hijos con su ideología”, a lo que Verdejo respondió que ya estaban preparando una respuesta.
Horas después de la publicación de la entrevista, el partido ultraderechista, que siempre ha erigido a la Policía Nacional como estandarte de la seguridad nacional, emitió un comunicado para solicitar una rectificación por llamar ignorantes o maltratadores a quienes utilizan el término “denuncias falsas”. Además de la rectificación, solicitan la reprobación pública del Jefe Superior del CNP en Ceuta, ante estas declaraciones.
El resto del comunicado está plagado de falsedades respecto a la Ley de Violencia de Género a la cual culpan de “la lapidación social contra centenares y miles de hombres inocentes acusados injustamente de violencia de género, además de dar pie a que las mujeres que acusan falsamente lo puedan seguir haciendo sin temor a ser investigadas”.
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